Combates en San Carlos «Los efectivos de los RI 25 Y 12 Abaten Helicópteros Británicos»

El 21 de mayo de 1982 al iniciarse las acciones en el estrecho de San Carlos los hombres a cargo del teniente primero Carlos Daniel Esteban del RI 25 enfrentaron a los ingleses, dando alerta a Puerto Argentino sobre el desembarco y produciéndoles considerables bajas a pesar de la inferioridad de condiciones.

Por Sebastián Miranda[i]

El 15 de mayo la 3ra Sección de la Compañía “C” del RI 25 al mando del Tte 1ro C. D. Esteban y el Subt R. O. Reyes (42 hombres) junto a una Sección del RI 12 mandada por el Subt José Vázquez (21 efectivos) fue enviada al estrecho de San Carlos para dar alerta temprana ante posibles desembarcos británicos.

Juntos formaron el Equipo de Combate Güemes.El grupo del Tte 1ro C. D. Esteban se ubicó en Puerto San Carlos. La escasa población, 49 personas, fue censada, reunida y se les requisaron armas y radios. Mientras tanto el grupo del Subt Reyes fue enviado a 9 kms a la altura 234 con una dotación de morteros y cañones sin retroceso.

A las 00.30 hs del 21 de mayo la flota británica comenzó a ingresar al estrecho de San Carlos, enfrentándose con los efectivos del Subt Reyes. Mientras se desarrollaban estos sucesos, los hombres del Tte 1ro C. D. Esteban se pusieron en alerta al escuchar el cañoneo que se desataba contra sus camaradas en la altura 234.

Cerca de las 03.00 los primeros efectivos del Regimiento 2 de Paracaidistas y del 40 Comando de los Royal Marines tocaron tierra. Desde una altura cercana al puerto, los soldados Díaz y Oporto informaron sobre la presencia de los buques enemigos. El Tte 1ro subió a la posición y constató la información dada por los soldados. Con 41 hombres debía hacer frente a más de 6000 británicos … .

Rápidamente transmitió las novedades a Darwin, la misión de dar alerta temprana, objetivo de su misión, estaba cumplida, por lo que dejando el equipo pesado ordenó un cambio de posición.

21 de mayo de 1982-Malvinas-Cronologia de Guerra - » Mi... en Taringa!

Cerca de las 08.40 un helicóptero Sea King se aproximó desprevenidamente desconociendo la presencia de los hombres de Esteban. El oficial no dudó y ordenó abrir fuego. El aparato recibió múltiples impactos de las armas livianas, perdió su carga y se retiró humeando. Instantes después otro helicóptero, un Gazelle armado con cohetes se aproximó a la posición.

La orden se repitió ¡Fuego!, la aeronave recibió de lleno los impactos de los bravos efectivos, gravemente herido, su piloto Evans lo posó en la desembocadura del río San Carlos donde el aparato se hundió.

Sus dos tripulantes lograron llegar a tierra pero murieron:

         “Cuando vimos al helicóptero que se nos venía encima nos preparamos pero parece que no nos vio o tardó en hacer puntería porque se nos puso de costado. Ahí le tiramos con todo a la orden del Teniente 1ro. Vimos como le impactaban todas las municiones. Se estremeció todo y se llenó de humo. Empezó a girar y a caer, se clavó en la costa del mar. Toda le gente del pueblo subió a socorrer a los pilotos. Pero realmente le tiramos con todo, creo que no salió ninguno vivo”.[ii]

Con la adrenalina a pleno, los soldados cambiaron de posición cuando repentinamente vieron un segundo Gazelle que se movió para lanzar sus cohetes contra la columna del Tte 1ro Esteban, separada unos 100 metros de la del Subt Vázquez. El resultado del fuego reunido se repitió: el aparato se estrelló a unos 10 metros de los hombres de Vázquez, sus dos tripulantes murieron. Un tercer Gazelle apareció en escena, el fuego reunido lo obligó a alejarse lanzando humo. El soldado Víctor Bertone (imagen), protagonista de los sucesos, nos dejó su testimonio:

       “(…) Después de caminar ente 600 y 700 m., nos sobrevuelan dos helicópteros enemigos, a los cuales les abrimos fuego reunido logrando averiar al segundo que nos sobrevoló. Después de caminar algunos metros más y de realizar un cambio de posiciones, nos sobrevuela otro helicóptero más al cual le hicimos fuego reunido, y logramos derribarlo; cae dentro del río San Carlos. Al mismo tiempo, empezamos a recibir fuego de morteros y ametralladoras, que por suerte no dan en el blanco. Otro helicóptero intenta atacar nuestras posiciones pero también lo derribamos de la misma manera, muriendo todo el personal que lo ocupaba. Minutos después, un nuevo helicóptero nos ataca; le disparamos, pero logra escapar”.[iii]

En pocos minutos la reducida tropa de los RI 12 y 25 había cumplido la misión de dar alerta sobre el desembarco, enfrentado a más de 6000 británicos, derribando dos helicópteros, y dejado fuera de combate a otros dos.

 Perseguida por los británicos, la tropa del Tte 1ro Esteban se replegó hacia el este emprendiendo una agotadora marcha:

        “(…) Decidimos continuar la marcha, que sería de unos 30 km, hasta donde se encontraba una casa abandonada, la cual ocuparíamos de noche para resguardarnos del frío, ya que todo nuestro equipo había quedado en San Carlos. En esta permanecimos hasta el 22 de mayo, cuando a últimas horas del día nos sobrevuela un helicóptero enemigo que descubre nuestra posición, lo que nos obliga a seguir la marcha, que se había tomado prácticamente imposible, ya que durante la noche se acentuaban aún más por las irregularidades del terreno. Marchamos unos 7 u 8 Km. y nos detuvimos en la falda de un cerro tratando de dormir, pero nos resultó imposible debido al gran frío reinante. Al amanecer emprendimos la marcha, dirigiéndonos a un pueblito llamado Douglas Paddok, donde se hallaban unos 40 habitantes (…)”.[iv]

El 24 de mayo llegaron a Douglas Paddok donde requisaron dos Land Rover de los kelpers. Uno de estos logró llegar a Puerto Argentino informando sobre la posición de los 42 hombres. El 25 de mayo, día de la Patria, se realizó una sencilla y emotiva ceremonia. Finalmente el 26 de mayo, cerca del mediodía, aparecieron 4 helicópteros UH-1H de la Aviación del Ejército comandados por el Cap Svendsen que recogieron a los valientes del 12 y el 25 para llevarlos a Puerto Argentino. Pocos minutos después estaban de nuevo entre las fuerzas propias, siendo recibidos y felicitados por el J R I 25.

El desempeño de estos jóvenes oficiales, suboficiales y soldados de los Regimientos 12 y 25 fue excepcional. Reequipados se prepararon para el próximo combate, el de Darwin, en la que nuevamente los efectivos de los RI 12 y 25 se cubrirían de gloria.

Bibliografia

ALARCÓN, José Luis. Sección Gato RI 25. Recuerdos de Malvinas, Buenos Aires, Ediciones Argentinidad, 2015.

CONSEJO SUPERIOR DEL ARMA DE INFANTERÍA. La Infantería Argentina en Malvinas. Fiel a su Historia, Buenos Aires, Consejo Superior del Arma de Infantería, 2013.

EDDY, Paul y LINKLATER, Magnus. Una cara de la moneda. La guerra de las Malvinas según la versión del The Sunday Times Insight Team de Londres, Buenos Aires, Hyspamérica, 1982.

EJÉRCITO ARGENTINO.  Informe oficial del Ejército Argentino. Conflicto de Malvinas, Buenos Aires, Ejército Argentino, 1983.

GIGLIOTTI, Carlos A. Bravo 25. Un puñado de valientes. La épica historia de la Compañía C del Regimiento de Infantería 25 en Malvinas, Buenos Aires, Ediciones Argentinidad, 2017.

MIRANDA, Sebastián. Mohamed Alí Seineldin, Buenos Aires, Ediciones Argentinidad, 2018.

TESTONI, José Luis. La Sección. Los elegidos, Córdoba, Tinta Libre, 2016.


[i] Licenciado y profesor de Historia, Subteniente de la Reserva del Arma de Infantería.

[ii] Testimonio del soldado René Oporto En: GIGLIOTTI, Carlos A. Bravo 25. Un puñado de valientes. La épica historia de la Compañía C del Regimiento de Infantería 25 en Malvinas, Buenos Aires, Ediciones Argentinidad, 2017, p. 161.

[iii] Testimonio del soldado Víctor Bertone. En: BERTONE, Víctor. Malvinas un sentimiento. En: Revista Defensa y Seguridad Mercosur, Buenos Aires, Defensa y Seguridad, Año X, Nro. 63, noviembre– diciembre de 2010, p. 14.

[iv] Testimonio del soldado Víctor Bertone. Op. cit., pp. 14–15.