Operaciones Chindits en la 2da Guerra Mundial aplicativas al combate en el monte

TP José BENÍTEZ FLORES

Metodología de la investigación

Para poder abordar el tema en el cual nos vamos a insertar e inmiscuir, durante el desarrollo del presente trabajo, es necesaria una búsqueda profunda y estudio inicial de los orígenes, las causas y las consecuencias de los hechos históricos que se relacionen directamente con los mismos. Pudiendo de forma tal, desglosar de la mejor manera, las diferentes variables que hagan a su entendimiento, que sirvan de sustento para las conclusiones que derivan de dichos sucesos. En dichas conclusiones, nos encargaremos de definir las comparaciones de las operaciones chindits con las de las tropas de monte en la actualidad en el EA,  basados en el conjunto de técnicas, métodos y procedimientos ejecutados en el AGPMte.

Objetivo

El objetivo del presente trabajo es poder definir, sistematizar y comparar, técnicas, métodos y procedimientos de las operaciones ´´CHINDITS´´ en el desarrollo de la 2da Guerra Mundial, aplicativas en la actualidad en las tropas de monte del EA.

Situación previa a la 2da GM

Antes de que la Segunda Guerra Mundial estallara, Birmania era parte del Imperio Británico, después de haber sido progresivamente ocupada y anexionada luego de tres guerras anglo-birmanas en el siglo XIX. Inicialmente gobernada como parte de la India británica, Birmania se formó como una colonia separada bajo el Gobierno de la India con la Ley 1935.

Bajo el dominio británico, se había producido un importante desarrollo económico, pero la mayoría de las comunidades birmanas se agitaban cada vez más contra estos. Entre sus preocupaciones estaban la importación de trabajadores indios para proveer de la fuerza laboral que necesitarían muchas de las nuevas industrias dentro de Birmania, y el desgaste de la cultura tradicional agrícola, como la tierra que se usaría para las plantaciones de cultivos de exportación o que se hipotecarían a los prestamistas indios. La presión por la independencia fue en aumento, por lo que cuando Birmania fue atacada, los birmanos no estuvieron dispuestos a contribuir a la defensa de la clase dirigente británica, y muchos movimientos se aliaron al eje, algo que evidentemente ayudó a los japoneses, que apoyaban la independencia birmana.

Los planes británicos para la defensa de las posesiones en el Lejano Oriente involucraban la construcción de campos de aviación que unieran Singapur y Malasia con la India. Estos planes no se habían tenido en cuenta por el hecho de que Gran Bretaña también estaba en guerra con Alemania, y cuando Japón entró en la guerra, las fuerzas necesarias para defender estas posesiones no estaban disponibles. Birmania era considerada militarmente atrasada, y no era vista como objeto de amenaza para los japoneses.

Intereses del País del Japón sobre Birmania

Sus planes de participar en un ataque a Birmania fueron en parte causados por sus propios recursos naturales (que incluían algunas reservas de petróleo provenientes de los campos de alrededor de Yenangyaung, también minerales como el cobalto y grandes excedentes de arroz), otra razón fue para proteger el flanco de ataque aliado contra Malaya y Singapur, y proporcionar una zona de amortiguación que protegiera los territorios que pretendían ocupar.

Así mismo un factor determinante para la invasión por parte de Japón, fue la carretera de Birmania terminada en 1938, que unía Lashio al final de la línea férrea desde el puerto de Rangún con la provincia china de Yunnan. Este enlace estaba siendo utilizado y fue construido para trasladar ayuda y municiones a las fuerzas chinas nacionalistas de Chiang Kai-Shek, quien había estado luchando contra los japoneses durante varios años. Los japoneses, naturalmente, querían cortar ese enlace logístico. Las actividades bélicas por parte de Japón iniciaron en el sur de Birmania en diciembre de 1941, finalizando el 1 de agosto del siguiente año, culminando con la conquista de Birmania.

En el marco de la segunda guerra mundial, Cuando Japón ocupó Birmania en 1942, los soldados del Ejército Británico que no habían dejado de sufrir una derrota tras otra hasta ser expulsados más allá de la India, llegaron a creer realmente que los japoneses eran una especie de “superhombres invencibles” a los que era imposible vencer. Se tendría que esperar hasta el nacimiento de las patrullas “Chindits” en 1943, para que los ingleses volvieran a confiar en ellos mismos y demostrasen a los nipones que no eran tan poderosos como habían imaginado.

FUERZAS CHINDITS

En 1942 cuando los japoneses invadieron Birmania la Oficina de Guerra en Londres le brindó los servicios del Coronel Orde Wingate al General Wavell, Comandante en Jefe de las fuerzas británicas. Hacia 1943 el balance de fuerzas en el Asia se comenzaba a inclinar en favor de los Aliados, el General Orde Wingate pensó que era necesario cambiar las tácticas de lucha en la jungla donde los japoneses les llevaban una gran ventaja táctica y operacional. Creó la táctica que llamó «Long Range Penetration» o Penetración de Largo Alcance, método que fue puesto en práctica por los Chindits.

La clave principal en las operaciones que planeaba el Coronel Wingate era la movilidad, que el propio Wingate definía como “La capacidad de atacar cuando uno lo decida y en el lugar menos esperado por el enemigo y luego poder retirarse a terreno favorable sin ser perseguidos por este”. Las fuerzas de tierra se enzarzarían en una guerra de emboscadas y de golpes de mano tras las líneas enemigas, sin verse refrenados, ni atados, por las líneas terrestres de comunicación, convencionales y vulnerables. Las unidades operarían en columnas tan pequeñas que pudieran escapar del enemigo sin dificultad, y lo suficientemente grandes como para poder infligir el daño suficiente en objetivos defendidos tales como depósitos de suministros y municiones, vías férreas, puentes, depósitos de agua.  Con la imposibilidad de contar con el apoyo terrestre para los suministros, sería la fuerza aérea la que les proveería bien aterrizando en las zonas que lo permitieran, bien lanzando los suministros en paracaídas.  Además el apoyo aéreo sería decisivo en el reconocimiento de las áreas de combate y podría incluso suplir el inexistente apoyo de la artillería en los enfrentamientos con el enemigo. El enlace de radio sería también decisivo para poder coordinar las fuerzas de tierra con el apoyo aéreo.

Organización

El General Wingate,  organizó su Brigada de Chindits en columnas poniendo al frente de cada una de ellas a un Comandante. Además decidió constituir un Cuartel General en la retaguardia para dirigir el apoyo y el suministro aéreo, bajo mando de un Capitán. 

La composición tipo de una Columna era la siguiente:

  • 400 soldados de Infantería.
  • 1 Pelotón de Reconocimiento de los Rifles de Birmania.
  • 1 Pelotón de Commandos.
  • 2 Escuadras de Morteros.
  • 2 Escuadras de Ametralladora “Vickers”.
  • 1 Pelotón de Acemileros. (120 mulas).
  • 1 Sección de Enlace Aéreo.
  • 1 Médico.
  • 1 Equipo de Radio para la comunicación entre Columnas.

Con esta disposición de la fuerza, el General Wingate pretendía que cada Columna pudiera marchar de forma autónoma, reagrupándose con otras columnas cuando fuera necesario para poder conseguir un objetivo en concreto. De esta manera se lograba la necesaria movilidad, que les permitiera desaparecer en la jungla si fuera necesario, y además les permitiría proporcionar la necesaria seguridad para llevar a cabo las operaciones.

Entrenamiento

Una vez constituidas las columnas, empezó el entrenamiento específico para la adaptación de los hombres al movimiento y al combate en la jungla.

El primer objetivo que trató de conseguirse fue el de poner a los hombres en una adecuada forma física y mejorar las competencias de la unidad. Se programaron marchas continuas por las áridas llanuras de la India central, diseñadas para seleccionar a los hombres y poder descartar a aquellos que no pudiesen aguantar las marchas. De hecho, el no poder terminar alguna de esas marchas era motivo suficiente para ser apartado de la unidad y de las operaciones venideras.

Además se formó a los hombres para que se alimentasen de lo que había en la jungla cuando se les terminasen los suministros, acostumbrándoles a comer pavo real, mono ó, llegado el caso, a sus propias mulas.

Este riguroso entrenamiento y la disciplina que el General Wingate imponía eran esenciales para poder acostumbrar a las tropas que en pocas semanas estarían operando sin suministros regulares y sin ayuda médica especializada. El entrenamiento sirvió para descartar a aquellos que no estaban físicamente ó mentalmente preparados para esas futuras misiones.

Armamento y Equipo

La 77ª Brigada de Infantería de los Chindits, llevaban una gran variedad de armas ligeras.

Rifles Lee-Einfield MkIII, muy valorados por su alcance, por su robustez, por su facilidad de uso y puntería, a pesar de contar con cargadores de sólo 10 disparos.

Subfusiles Thompson del calibre .45, en mucho mayor número que en otras unidades de infantería debido a su potencia de fuego a corta distancia. Preferían además los cargadores alargados de 20 disparos a los redondos de “tambor” debido a la facilidad para llevarlos con el resto del equipo.

Ametralladoras ligeras Bren del calibre .303, que proporcionaban una gran potencia de fuego y precisión en distancias de hasta 500 metros, a pesar de que añadían 10 kilos más al equipo del Chindit que tuviera que llevarla.

También utilizaron carabinas de fabricación americana M-1 Carbine, aunque en menor número que las Thompson, también eran muy apreciadas por su facilidad de utilización en la jungla y su precisión.

Las armas cortas con las que se dotó a los Oficiales en un principio fueron los revólveres Webley de calibre .38, aunque con posterioridad algunos de ellos recibieron también pistolas Colt de calibre .45.

Granadas de mano de tipo nº 36 Mills, nº 69 aturdidoras, ó nº 77 de fósforo, utilizadas para limpiar bunkers ó edificios ó para señalar puntos para los lanzamientos de suministros.
Morteros de 2 y 3 pulgadas, utilizados con munición rompedora, fumígena, iluminante, incendiaria, con los que intentaban suplir la falta de apoyo de la artillería en el combate en la jungla.

Rifles antitanque de cerrojo, Boys, de calibre .50. Aunque no era un arma muy valorada debido a su longitud, su peso, el gran ruido que hacía al dispararse, se solía utilizar contra fortificaciones y bunkers.
Ametralladoras Vickers, dos en cada columna, que proporcionaban el apoyo de fuego sostenido. Tanto las Vickers, como los morteros de 3 pulgadas, debido a su peso eran transportados por las mulas de las columnas.

Lanzallamas Lifebuoy, de gran eficacia también contra los bunkers y las fortificaciones japonesas.

Al principio los Chindits llevaban una mezcla de uniformidades diferentes, procedentes como eran también ellos de distintos Regimientos. Más tarde adoptaron todos ellos el sombrero “slouch” como parte distintiva de esa uniformidad, ya que era fresco y además les protegía los ojos del sol de la jungla. Los gurkhas optaron por sus propios sombreros, añadiéndoles en ocasiones redes de camuflaje. Llevaban además el uniforme khaki de instrucción, que más tarde fueron tiñendo para que adquiriera un color “verde jungla”, y en ocasiones jerseys de lana y mantas ligeras para las noches en la frontera indo-birmana, botas de combate, (negras y con suela de clavos en el caso de los gurkhas), tobilleras, y una mochila de tipo Everest, (aunque los gurkhas preferían la mochila convencional del Ejército), en la que llevaban dos pares de calcetines, un jersey, un plato de campaña y cubiertos, aguja e hilo, pastillas potabilizadoras, repelente de mosquitos, cordones de repuesto, zapatillas ligeras, “flotadores” para el paso de ríos, y cuerdas con ojal.

Conclusiones

De acuerdo a la información anteriormente mencionada y el cuadro comparativo de ambas tropas se pueden extraer las siguientes conclusiones:

a. Que las tropas de chindits, marcaron el inicio en una estructura y forma de combatir en un ambiente geográfico particular determinado y modificaron todo lo conocido en aquel entonces.

b. Que las tropas de monte en la actualidad en el EA, se nutrieron para operar en un terreno similar con técnicas, métodos y procedimientos que persiguen la misma finalidad.

c. Que en con respecto al área de personal, vale destacar que en cantidades no son las mismas, por el tiempo y el lugar,  pero si para el desarrollo de sus operaciones, utilizaban elementos con el mismo objetivo. (Maniobra, Apoyo de fuego, Apoyo Logístico, Comunicaciones,  Exploración, Pelotones Comandos, Apoyo Sanitario).

d. En el área de operaciones, se denota el entrenamiento que conlleva el AGP, siendo para ambos casos símiles.

e. Que se hace hincapié durante el desarrollo de las operaciones en las pequeñas fracciones, y en objetivos específicos.

f. Que para las instrucciones de las técnicas, procedimientos y métodos, se valían de operaciones similares a las que hoy en día se practican en las tropas de monte actuales del EA.

g. Se puede concluir en las operaciones que los principios de la conducción para las mismas tienen semejanzas a las actuales en el AGP.

h. Con respecto a materiales, se puede decir que el equipo y armamento no guardan relación a los de la actualidad, pero eso se debe al lugar y tiempo en el cual transcurrieron los hechos.

i. Que en la provisión inicial de efectos, se puede decir que si puede haber una analogía a la actualidad con las de aquel entonces. j. Que en la distribución de los efectos, se planifica similar a los de la actualidad, mediante vía aérea.