Estos hombres fueron el ejemplo cabal de lo que significa ser un soldado argentino

Emotiva ceremonia en el campo de la gloria de la Guarnición Ejército Arana, donde el Regimiento de Infantería Mecanizado 7 “Coronel Conde” y el Escuadrón de Exploración de Caballería Blindado 1, ambas unidades veteranas de la guerra de Malvinas, conmemoraron el 37° aniversario de la batalla de Monte Longdon. Participaron autoridades militares, veteranos y familiares de caídos.

La ceremonia comenzó con la presentación de la Agrupación “11 de Junio” por parte del jefe de tropas, teniente coronel José Gutiérrez dalla Fontana, al jefe del Estado Mayor General del Ejército, teniente general Claudio Ernesto Pasqualini, quien presidió el acto acompañado por el secretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural, Claudio Avruj, el intendente de Ensenada, Mario Secco y la presidenta del Concejo Deliberante de La Plata, Ileana Cid.
Se encontraban presentes junto a las autoridades el subjefe del Ejército, general de división Héctor Prechi; el comandante de Adiestramiento y Alistamiento, general de división Aldo Sala; el comandante de la 1ra Brigada Blindada, general de brigada Norberto Zárate; el presidente de la Comisión Nacional de ex-combatientes de Malvinas, César García; y la presidenta de la Comisión de Familiares de Caídos en Malvinas, María Fernanda Araujo.

Posteriormente, hicieron su entrada los veteranos Jesús Martín, Carlos Coppa y Darío Montenegro, portando la bandera del Regimiento con la que fueron a las Islas. Los acompañaron los héroes del Escuadrón de Exploración de Caballería Blindado 10 Guillermo Baliña, Juan Carlos Balladares y Daniel Marini, llevando los cofres con los soles de la bandera de guerra que flameó hasta el último día de combate. Ocuparon un lugar de privilegio debajo del palco donde se encontraban las autoridades, de frente a las tropas formadas.

Con las 42 antorchas ya encendidas en recordación de cada uno de los héroes del Regimiento y del Escuadrón que cayeron en las Islas, la Banda Militar “Paso de los Andes” ejecutó el Himno Nacional Argentino. Seguidamente, se efectuó una invocación religiosa y se leyó la resolución del jefe del Ejército para la imposición de la Orden a los Servicios Distinguidos en el Grado de Comendador.

 

Recibieron esta distinción los familiares del teniente (post mortem) Juan Domingo Baldini, del sargento ayudante (post mortem) Jorge Alberto Ron, del sargento (post mortem) Darío Rolando Ríos, del cabo primero (post mortem) Pedro Alberto Orozco y de los cabos (post mortem) Miguel Ángel Pascual, Néstor Miguel González, Víctor Rodríguez, Miguel Ángel Falcón, José Luis Rodríguez Silva, Carlos Alberto Hornos y Donato Manuel Gramisci.

Luego, se llevó a cabo la recreación del combate de Monte Longdon en la que, a la par del relato de lo sucedido, se pudieron escuchar claramente los sonidos del combate y ver las luces de las bengalas, proyectiles y morteros disparados aquella noche del 11 y madrugada del 12 de junio. Finalizada la representación, se nombró a los 42 héroes caídos, acompañando la mención de cada uno de ellos con el grito de “¡Presente!” y con una campanada, al mismo tiempo que se iluminaba su respectiva cruz en el campo de la gloria.

A continuación, los veteranos de la Guerra de Malvinas colocaron una placa recordatoria en nombre de la Sección de Ametralladoras 12,7 de Infantería de Marina, que combatió como fuerza agregada del Regimiento. Acto seguido, el jefe del Ejército, los jefes del Regimiento de Infantería Mecanizado 7 y del Escuadrón de Exploración de Caballería Blindado 1, autoridades de La Plata y de Arana, y veteranos de guerra colocaron ofrendas florales.

En representación del Escuadrón, el soldado clase 62 Jorge Contreras fue uno de los que pasó a dejar las ofrendas. Sobre el combate de Monte Longdon contó: “Los recuerdos siempre están presentes, pero lo que yo siempre rescato de ello es el compañerismo. Siempre decía que, más que de un arma, teníamos el apoyo del compañero, del que estaba al lado, quien te defendía y te incentivaba a no bajar los brazos e ir siempre para adelante. Eso para mí personalmente fue muy bueno”.

Al hablar sobre el sargento Jorge Alberto Ron, primera baja del Escuadrón, comentó sus cualidades como suboficial y como persona: “Él fue alguien que siempre escuchó al soldado. Vivía en San Antonio de Padua y yo era de Merlo, y todas las mañanas me esperaba puntual a las 5:15 de la mañana en la estación de tren de Padua para llevarme hasta el Escuadrón, que quedaba en Tablada. Para mí, siempre se mantuvo en lo suyo; fue un buen militar, un héroe y siempre tengo el mejor de los recuerdos para con él. Siempre está presente”.

Seguidamente, y tras la ejecución del silencio militar en memoria de los 42 caídos, hizo uso de la palabra el jefe del Ejército. Luego de agradecer la presencia de las autoridades, veteranos, familiares y representantes municipales, destacó: “Participamos de una ceremonia que tiene el propósito de unir a todos los argentinos: reconocer y homenajear a quienes fueron capaces de arriesgar la vida por la Patria. Hoy honramos a los 42 bravos guerreros del Regimiento de Infantería 7 y del Escuadrón de Caballería Blindado 10 que murieron en el campo de combate en las Islas”.

Con respecto a los caídos en Monte Longdon, remarcó: “Fueron el ejemplo cabal de lo que significa ser un soldado argentino. Cumplieron con su deber militar y ciudadano, sin cuestionarse ni las circunstancias ni la magnitud de su adversario”. Por otra parte, los comparó con quienes acompañaron a Manuel Belgrano, José de San Martín y Martín Miguel de Güemes en sus distintas campañas, al afirmar que en Malvinas “nuestros hombres estuvieron a la altura de esos antepasados”.

Al mismo tiempo, manifestó: “Estas 42 cruces encarnan a los héroes de esta guarnición militar. Estos hombres nos dejaron un testimonio único de coraje. Son nuestros héroes recientes que nos dejaron un ejemplo de lucha y de valor. Esta ceremonia es para dar testimonio y honrar a quienes han sido protagonistas de uno de los hechos más trascendentes de la historia argentina en el siglo XX”.

Por otro lado, agradeció la presencia de los familiares de los caídos en combate, a quienes les hizo saber que “la condecoración que se les ha otorgado reafirma el profundo respeto y reconocimiento del Ejército Argentino hacia la persona de sus héroes” y también hacia ellos. Al mismo tiempo, reconoció a la gran cantidad de veteranos que estaban en la ceremonia, tanto oficiales como suboficiales y soldados. “Son soldados con mayúscula, que combatieron todos juntos y pusieron sus vidas al servicio de la Patria”, afirmó el teniente general Pasqualini.

Para cerrar, resaltó que las ceremonias y las charlas de los veteranos en el país sirven para mantener viva la causa Malvinas y que “el patriotismo que impulsó a nuestros soldados a luchar con arrojo y coraje en las Islas debe mantener a todos los veteranos de guerra juntos y motivarnos en nuestro trabajo diario para que avancemos hacia una nación que nos encuentre a todos los argentinos unidos”.


Una vez finalizado el discurso, la banda militar tocó la canción del Ejército Argentino. Se inició luego el tradicional desfile, del que participaron los veteranos de guerra del Regimiento de Infantería 7 y del Escuadrón de Exploración de Caballería Blindado 10, y la Agrupación “11 de Junio”. Cerraron el desfile quienes portaron las 42 antorchas durante toda esta emotiva ceremonia.